Día 56
Al fondo de mi terreno está el jardín, es lo único que vale la pena de mi casa. Lo flanquean flores hermosas. Todo el día zumban las abejas. Las mariposas revolotean con su alas hecha de polvo de estrellas, trinan los pájaros. Una enredadera trepa las paredes. He logrado desterrar a los conejos. Lo único que queda es un zorrillo que va y viene a su antojo. Tengo una tarima de madera en la cual coloque macetas repletas de plantas anuales. En la esquina crece una ceiba, su tronco sagrado y fuerte. Ahí, de sus ramas que tanto amo, si no nos dejan salir pronto, me colgaré
Black Dot
04 de June de 2020 / 08:41
04 de June de 2020 / 08:41
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