No podía aceptar que la cercanía de esa mujer le provocara aquellos pensamientos y deseos que consideraba impuros y pecaminosos. Tampoco se explicaba que le palpitara el corazón a esa velocidad, ni el porqué de la sudoración y la falta de palabras. Mucho menos ese impulso a tomarla entre sus brazos y hacerle el amor, pero lo hizo. Luego entendió. No había sido él, sino los sueños reprimidos de tantos veranos que llevaba dentro.
Pseudónimo
02 de July de 2020 / 11:13
Voto de castidad 02 de July de 2020 / 11:13
Pseudónimo
O impuros o pecaminosos 02 de July de 2020 / 17:46
Robot
Taller 06 de July de 2020 / 12:15
Fernando
Taller 06 de July de 2020 / 12:16
Fernando
 

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