Hola Pseudónimo.

Fijate cómo es es curiosa la mente: puedo creerme que un mosquito sea un esteta, escriba una carta y la pase por debajo de la puerta, pero me parece una exageración tener que ponerle trancas a las puertas para que no entre... jajaja
La verdad es que una vez montados en las situaciones absurdas, el cielo es el límite. Es solo que me me pareció 'too much',,, pero entiendo como lo razonas y tiene su lógica. Dejémoslo entonces.
Y eso me lleva a mi última idea sobre los motivos para dejar la puerta abierta: si te sigo bien, creo que prefieres que le pida dejar la puerta abierta por el hambre canija, más que por contemplarla... ¿O podríamos combinar ambas razones al final de la carta?

Abrazo moscoso, bzzz, bzz, bzzzzzzzzzz (jajaja)