Premio de consolación
Siempre fui muy generoso con mis víctimas. Después de hacerlas sufrir lo indecible, les obsequiaba un collar de piedras preciosas (por su forma y tamaño) o un robusto par de zapatos de cemento, además de un tour a los arrecifes de coral. En ocasiones me veía más esplendido y las vestía, cubriéndolas de pies a cabeza con ese mismo material tan versátil y duradero. Se quedaban de una pieza y nunca hubo quejas ni devoluciones.
Murata
20 de April de 2021 / 14:30
20 de April de 2021 / 14:30
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