La otra cara
Se declaró inocente y víctima de las circunstancias. Decía que su reino no era de este mundo, que había venido salvar al mundo del pecado y a ayudar a los pobres y a quienes sufren. Luego de ser perseguido, capturado y perder la libertad, el veredicto del juez fue la pena de muerte. El clamor popular exigía la crucifixión. El asesinato en serie de traficantes, pederastas, mafiosos y criminales, no le valieron ninguna consideración. Menos aún los de prostitutas, indigentes, ancianos y enfermos terminales.
Pseudónimo
20 de January de 2022 / 17:46
20 de January de 2022 / 17:46
Para poder escribir en la Marina, tienes que registrarte como usuario o ingresa.