Hace treinta años Juan, cumplió los ochenta. Ha esperado a que en el ministerio le otorgaran un cuerpo nuevo. No de bebé, porque él ya ha tenido una larga vida y no encuentran la forma de borrar de forma total su memoria. —Podría ser desastroso si recupera sus recuerdos en medio de la niñez.
Cambian las cosas claro, la forma de envejecer ha sido derrotada por el Ministerio de rejuvenecimiento, En fin, ahora todos tenemos derecho a rejuvenecer. Lo malo es que algunos de nosotros, sin influencia y nada más que nuestro carnet de derecho habientes, terminamos de envejecer en espera de esa renovación.